Aquí se pelea y se pelea “da morire”, aquí se llora y se llora “da spaccare”, aquí se lamenta y se lamenta “da matti”, aquí se juzga y se juzga “sul serio” pero tú y yo hemos decidido crecer juntos. Así que aquí lo que se necesita es aguante.
Parece que fue ayer que nos conocimos o es que acaso no fue hace un mes que nos tomamos esos tequilas en pino 33? No fue solo la semana pasada que recorrimos Chiapas en camión, o es que no fue solo ayer que tomamos el sol? Siento que éramos unos niños y también tengo la impresión que mi corazón latía más rápido y se sintió atraído al tuyo. Ahora te veo como todo un hombre, con el peso de la responsabilidad sobre tus hombros, con los ojos más cansados de tanto trabajar, sin pelo de tanto estrés.
Pero igual ahora quiero motivarte y llenarte de ánimo, hoy quiero agradecer el trabajo que haces fuera de casa, pero sobre todo el que haces aquí dentro, en tu hogar. Tu trabajo de papá.
Amo ver cómo respondes con calma cuando nos (nosotras las niñas) peleamos por algo. Me encanta ver cómo juegas con ellas. Escucho lo real de sus enojos cuando “ le prendi in giro”, veo el orgullo de sus sonrisas cuando logran armar aviones y helicópteros con el lego. Me siento agradecida de que les dediques tiempo después de una larga semana de trabajo (como esta que paso). Gracias a eso ellas están aprendiendo que la familia es lo más importante.
Amo ver como las cobijas en las noches. Y me encanta que las llenes de besos y abrazos. Que cada noche hay un libro para leer y otro libro de nunca acabar. Me siento agradecida que nunca dudas en llenarlas de cariños. Gracias a eso ellas dormirán con los ángeles y nada de pesadillas.
Amo que des ejemplo, ejemplo del bueno, cuando cambias pañales o organizas la cocina, cuando bajas la basura o cuando extiendes la ropa. Me siento agradecida por que me mantienes fuerte cuando estoy agotada y me sostienes cuando estoy triste. Gracias a eso ellas sabrán valor un hombre, un buen esposo y un autentico papá.
Amo que hagas maletas y no te aflija el hecho de levantarte a las 4 am para tomar un tren y regresar a casa a la 1 am bajando de otro tren, con dos mochilas al hombro, abrigos colgados, coche y roller empujados. Me siento agradecida porque un poco de juventud queda, y que se note!. Gracias a eso ellas se atreverán a la magia de la aventura, descubrirán el placer de viajar y confirmarán que el mundo es grande y hay que descubrirlo todo.
Amo verte de papá de nuestras hijas, me encanta ver ese ejemplo de .. y responsabilidad que le das a la vida, y si no importa que yo este aquí en sala y tu girando no se que film entre el baño y la puerta de casa. Yo estoy feliz por ellas, porque tienen el regalo de tenerte como padre. Y aunque todo esto lo hagas a tu manera yo lo acepto porque además ese regalo lo di yo. 😉