Quien es nuestra heroína? La mia sin duda es mi mamá, ella que lo ha logrado con poco, con mucho o sin nada. Ella, la berraca, la que se pone los guantes, la que agrando la familia, la protagonista de tres. Y yo ya quería ser la diva de dos. La diva sin tacones, la heroína sin capa y la protagonista sin fans. Pero si la mamá de dos. Y de tres y hasta de cuatro.
Desde que decidimos agrandar la familia siempre fui capaz de imaginarme cómo sería esa nueva experiencia, esa sensación, ese nuevo hijo, conseguía visualizarlo, hacer planes, conseguía contemplar cómo sería nuestra vida con un ser más. Con los superpoderes. Pero no era capaz de desatar el terrible nudo que se hacia en mi estómago, era como si se enredara una cuerda de angustia con una de satisfacción, porque da igual lo que hagas, siempre pensarás que podrías haberlo hecho mejor. Cosas de mamá, cosas de superhéroe.
Como la mujer que soy, me encantaría tener un hogar idílico en el que todo fuera paz y armonía, se jugara y se recogiera, se comiera muy sano, se escribiera y se fotografiara, se empacaran maletas y se viajara, se hicieran muchísimas caminatas al aire libre y nada se saliera del plan meticulosamente trazado por mamá. Desde que llego este nuevo ser a nuestra familia me toco asumir un poco de caos diario, cocina sucia, juguetes en el zapatero, gomitas de merienda, no bañarse, más pizza y pasta de lo imaginado, desarmar planes y no decidir nada con antelación, pues lo del hogar idílico no era para mi (nunca lo he logrado) por lo que acepté la supervivencia como forma de vida. Igual el mundo no se iba acabar.
Igual y todo esta mezcla de sentimientos de estas semanas y de reasegurar que un postparto nunca será fácil, este par o mejor este trio que me acompaña me da la satisfacción de ser una heroína. Para ellos lo soy!! Cuando me buscan y me miran, cuando me llaman y me piden comida, cuando me despiertan y me abrazan. Me encantaría ser la heroína que ellos creen que soy. Pero no lo soy . Y el nudo se convierte en nudo ciego. Porque cuando eres madre te pones todo tipo de disfraz, pero dentro sabes que en cualquier momento te quedarás desnuda, y en todas las situaciones no puedes mantenerte como la diva.
En algún momento se darán cuenta de que esta mamá, hizo, hace y seguirá haciendo de todo por ser para ellos el ejemplo a seguir, que esta mamá hace de todo para seguir el ejemplo de su mamá, pero también quisiera que llegara el día en que fueran conscientes que no tengo superpoderes. Así que me queda enseñarles, enseñarles mientras yo al mismo tiempo aprendo, aprender que la tristeza, la debilidad, la angustia, la imperfección, la nausea, forman parte también de nuestra vida. Y que en vez de taparla, podemos llevarla lo más dignamente que podamos.
Y es que como no quere ser la diva, la heroína y la protagonista de este par…