Despierto hoy y todavía me pregunto que ha pasado?? Porque no me lo permitiste Aurora?? Mamá estaba lista.. que paso?? tu también parecías estar lista. Lo habíamos decidido. En que momento cambiaste decisión? No he dejado de pensarlo. Me dormí pensando en ello a la 1.00 am. Me desperté pensando en ello a las 3.45 am. Y de nuevo a las 5.37 am. Y de nuevo a las 7 am. Que paso? Mi cuerpo estaba listo, te espero y siguió esperandote. Continuo a esperarte por más de 3 horas. Y tu decidiste esconderte. Te subiste de nuevo. Te giraste. Seguramente algo te decía que no debías salir de manera natural.. Aurora tu decidiste salir de mi cuerpo por cesárea. Me pusiste de nuevo en una sala operatoria. Aunque estaba feliz porque cada vez el momento de conocerte estaba más cerca. No quería entrar allí. Menos tu papá. Me pidió un par de veces que lo dejará quedarse afuera, y ya conocerás a mamá y sabrás cual fue su gran respuesta: “ni creas Pier, esta vez tu entras”, tu padre todo acojonado respondía: “por favor no soy capaz”. Hasta que lo convencimos explicándole que no vería nada de sangre que solo te recibiría al final. Cedió y paso a acompañarnos. También fue duro para él. No solo la cesárea si no todo el proceso de parto natural. Imaginaba cuanto impotente se sentía al verme sufrir con cada extenuante contracción.
Sabíamos que ese día nacerías desde que llegamos a la clínica para todo el personal estaba claro que de esa día no pasaba. Fue el 02.04.2017. Todo fue tan espontáneo. Todo en casa fue tan natural. A las 2 am, me di cuenta que iniciaría todo, a las 5 am tu hermana Lucía se despertó, y al lado de ella pase las ultimas contracciones en casa, entre dolor y dolor logre aguantar hasta las 6 am, cuando ya presentaba contracciones seguidas cada 5 minutos y con duración de 1 minuto. Salimos para la clinica. Después del primer monitoreo y caminar por una hora en aquella mañana fría por los alrededores de la clinica, llego el segundo monitoreo y después “el parte ha iniciado” dice la partera. Así llego el momento de pasar al -Kreißal-. Eran ya las 7.30 am. Empezaba a salir el sol, un octavo piso y teníamos desde nuestra habitación una increíble vista de Berlin.
Paso la mañana, paso el medio día. Las contracciones cada vez más intensas, más profundas, más largas, mamá cada vez más agotada, más ilusionada, más guerrera, papá cada vez más angustiado, más sensible, más consciente. Paso la tarde, hablábamos, hablamos de muchas cosas tu padre y yo, nos dio el tiempo de recordar otras, de tomar alguna foto y hacer cortos videos. Nunca imaginamos que lo lograríamos. Estábamos esperando nuestro segundo hijo. Nuestro segundo hijo, después de escuchar que noooo, no pueden, no deben tener más hijos. Nuestro segundo hijo después de un Hellp. Y parecíamos estarlo logrando por parto natural..!! Tanta dicha junta no podía ser cierta, así fue, lo segundo no se dio. Llego la noche, se rompió fuente, se dilato hasta 10 cm, todo listo, después de 22 horas de trabajo de parto, bienvenida puede pasar a cesarea.
Lo empece a percibir desde mucho antes, pero no quise asumirlo, quería seguir soñando en traerte al mundo de manera natural, cuando la ginecologa decidió hablar, fue como un cañonazo en lo más profundo de mi corazón, “es muy probable que tengamos que pasar a cesarea en las siguientes dos horas”. Aunque mi mente grito “lo sabia”, el resto de mi cuerpo, mi alma, mi corazón no lo admitían, llore, llore a cantaros, le di la mano a Pier, le pedi, le rogué a la ginecologa que no lo permitiera, le suplique a la partera que me ayudara, a pesar de mi desgaste me esforcé más y más por evitarlo, no pude.
Después de 3 horas estábamos entrando a aquella sala operatoria, parecía el stage para girar un film, full de luces, y personal rodando de manera acelerada, todos bien vestiditos de verde-azulado y yo desnuda sobre aquella camilla fría. Y fueron las 10:21 pm del 02.04.2017.