Te sientes desanimado criando niños trilingües? Dejando a un lado el idioma principal los otros dos idiomas “los minoritarios” tambalean. Y si el sentimiento que te invade es frustración con respecto al desarrollo del segundo o tercer idioma de tus hijos. Quiero darte una lista de retos:
1. Pon música de fondo muy seguido.
Considero que les ayuda a fomentar la interacción con el idioma, les proporciona una mayor predisposición y así les crea mayor interés.
2. Lee a diario a tus hijos.
Creo no necesita explicación.
3. Lee poesía.
Permite encontrar mensajes ocultos en una frase, hay un vocabulario inmenso por descubrir.
4. Busca juegos de mesa donde el vocabulario sea clave.
5. Cuéntale acerca de otras familias trilingües que están a tu alrededor.
Los motivará demasiado saber que hay otros niños como ellos que hablan más de un idioma y que vienen de otros países del continente.
6. Viaje frecuentemente a países del segundo o tercer idioma.
Inmersión. El reto más duro no solo cuando se vive muy lejos. Si no cuando hay que pedir paciencia a familiares y amigos.
7. Llévalo al supermercado.
Se pueden practicar muchas palabras, sobre todo los primeros tres años, colores, números, frutas y verduras.
8. Haz de esta prioridad la más importante.
Es algo de cada día. Pero se tardará años en dar resultados.
9. Haz vídeos de tus hijos y permitirles observarse mientras hablan el otro idioma.
Ellos identificarán sus errores. Les dará seguridad.
10. No te comuniques con ellos con señas, arma una frase cada vez que quieres decirles algo.
Aprovecha cada instante para hacer un dialogo en el segundo o tercer idioma. No desaproveches oportunidad.
11. Busca familias con el idioma en común y empiecen hacer actividades.
Seguro que en tu ciudad hay otra familia como la tuya, tan fácil como ir al parque, de pronto dos niños italiano no se comunicaran en italiano viviendo en Alemania, pero ya es un gran ejemplo que vean a los padres hablando en italiano. La mayoría de institutos de lenguas, o los consulados de cada país ofrecen actividades.
12. Usa la experiencia de otros como inspiración.
No dudes en seguir consejos, en hacer actividades o en leer más sobre el tema.
13. Habla, habla y sigue hablándole a tus hijos en tu lengua materna.
No pares de hablarle.
Y no olvidar que es fundamental no estresarse con el tema.
Los he llamado retos por que se que no son fáciles de cumplir. No se pueden llevar a cabo todos en un mismo día. Al inicio lograrás solo un par a la semana, pero con el tiempo cumplirás hasta cinco en un día. Cada uno tiene un propósito específico pero llegan todos a un mismo final.
Como ven, hasta la fecha y con nuestra hija mayor, no es un tema que de muchos dolores de cabeza. Y me alegro más cada día de poder ofrecerles este regalo, un regalo para toda la vida.
Con amor de una familia trilingue para otras!